Biznaga y Tipex: el punk perdura

Grupo: Biznaga + Tipex
Sala: 16 Toneladas

Este sábado la capital del Turia fue tomada por el punk. A modo de calentamiento a la locura total que se desplegó entre las paredes del 16 Toneladas la gente del Magazine organizó de manera casi altruista, ya que la entrada era libre, un concierto previo. En él actuaron Guay!, una formación barcelonesa que se mueve entre el new wave, el pop y el punk y Retraseres, unos viejos amigos de la sala que siempre cumplen con las expectativas que se forman en torno al espectáculo que son cada una de sus actuaciones.

Tras unas cuantas horas, donde las ganas no hicieron más que aumentar, al fin llegó la hora de Tipex. Los valencianos, que no son en absoluto desconocidos en nuestros escenarios, pusieron a la sala en pie representando la esencia más fidedigna del punk. Allí sacaron a relucir los temas de su primer LP, uno de los álbumes más notable del género de este 2018. Esta formación levantina, cuyos miembros cuentan con una larga trayectoria en otras bandas como Cuello, Podium o Rodilleras, destacan especialmente por la calidad de sus letras y la energía de sus riffs machacones.

A continuación, llegó el turno de Biznaga. Los madrileños, que llevan más de un lustro en el negocio, ponían punto y final a una ajetreada gira que los ha llevado por multitud de salas y festivales este año. Antes de retirarse a producir su futuro LP, que esperamos que salga en torno a mayo de 2019, pasaron por nuestra ciudad para evidenciar a qué viene tanto revuelo en torno a ellos. Tras estar nominados a los Premio Ruido de 2017 no han dejado de recibir buenas críticas y esto se debe al buen estado en el que se encuentran los madrileños. A lo largo de los sesenta minutos que conformaron su actuación pudimos disfrutar de muchos de los cortes que forman sus trabajos, como “Cul-de-Sac” o “Mediocridad y confort”.

Fue una noche inolvidable donde resulta difícil poner algún pero, la buena predisposición del público y la capacidad para estar a la altura de todas las formaciones redondearon la velada y nos regalaron esa sensación tan difícil de alcanzar y que nos permite olvidarnos de todo lo demás. Si a alguien le quedaba alguna duda sobre la pervivencia del punk, concebido en su forma más pura, desde luego esta noche quedó disipada.