Grupo: Calivvla + Lueve, Capullo! + Semana Santa
Sala: La3

“Las noches fueron hechas para decir cosas que no podrás decir a la mañana siguiente”, algo así, más o menos similar, espetó Alex Turner hace cosa de 7 años, en una de las frases más icónicas de su banda y con un poder difícilmente limitable. La noche como transformadora de las fieras. La noche como etapa especial del día y contraparte del mismo.

En la noche del sábado 15 de febrero había una cita especial en la estepa valenciana, en la zona pseudo-estudiantil de Blasco con La3 como base de una noche a tener en cuenta, de una de esas en las que el curso de la semana o incluso el mes puede cambiar (por no ponernos catastrofistas de más…). Estábamos ante un marco envidiable, al menos de entrada. Se reunían junto a una banda emergente como Semana Santa, dos de las bandas de las que más se está hablando en sus respectivos panoramas como son Llueve, Capullo! y Calivvla. Sin embargo, se sucedieron algunas extrañezas por la zona, una población difícil de tratar al lado de la sala, en un “Miniclub” que tildaremos de Pequepark, con su respectivo conjunto de gente gritando algunas de las memeces últimamente vistas en televisión o con ropajes propios de dibujos animados de Cartoon Network o Jetix, por desgracia los suponíamos desorientados y lejos de la zona de la Estación del Norte.

Haciendo un ligero salto temporal y pasando a hablar estrictamente del tema musical, los valencianos Semana Santa fueron los primeros en salir a la palestra, con un sonido más que interesante y claro que se vio ensombrecido por algunos problemas técnicos con la guitarra y por algo ya visto en la famosa sala, problemas de sonido generales, poca claridad de los instrumentos y la voz y acoples constantes. No obstante, siempre agradecer el dejar totalmente el corazón encima del escenario, además fueron los primeros en mostrar sus cartas y sacar en su setlist la vistosa canción que hiciera unas décadas atrás Parálisis Permanente, “Autosuficiencia”.

Tras esto los problemas siguieron, pero ello no hizo que los murcianos de Llueve, Capullo! bajaran el nivel, un grupo divertido con un directo estridente y sensacional, con sus excentricidades (al fin y al cabo todos somos algo raros, ¿no?) y mencionando como no podía ser de otra forma al Real Madrid, equipo poco querido en la capital valenciana. Uno a uno se sucedieron los temas de “121 goles”, el disco que presentaban en la terreta cerrando la actuación con su tema homónimo y dejando claro que “nada puede salir peor si estás preparado” y que llueva, si es que se atreven al escucharles…

Habiendo pasado por el escenario 2/3 de las bandas que aportarían su granito de arena a la noche era el momento de Calivvla, seleccionado su EP “CLV” como el mejor disco de la Comunidad Valenciana en 2019, mostrarían una vez más el porqué de las habladurías de la gente y su particular puesta en escena con el bajo en el medio demostrando absoluta potencia. Los de “After” o “Faraón” harían gala de su buen hacer musical en un directo conciso pero directo, recuperando, por segunda vez en la noche el famoso tema de Eduardo Benavente y mostrando otras tantas canciones que gustan al graderío, hasta que al final se acaba todo, toca emprender el camino a casa y… “estoy cabreado, es que no lo ves”. Por suerte, la música española está en alza, la escena es casi inmejorable y tendremos la ocasión de escuchar más música de calidad próximamente.

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