Neuman: De Crashpad al cielo

Grupo: Neuman
Sala: Joy Eslava

Neuman ya se está apoderando de la sala y es sólo su primera canción. Todo es denso, atmosférico, delicado. Los aquí presentes estamos embelesados por la melodía de Crashpad y guardamos silencio, símbolo de admiración y respeto frente a lo que está sonando. Aunque creo que Neuman no se da cuenta de todo eso, él sigue tocando su guitarra con los ojos cerrados, muy concentrado. Crashpad avanza y yo ya me he rendido frente a ella, es una canción bonita pero que escuece, duele y sana a la vez. Y el concierto acaba de empezar.

Ahora suena Stones y caigo en la cuenta de que estoy en un concierto especialmente bueno. De repente me acuerdo de los eruditos de la música nacional, esos que dicen que los grupos que cantan en inglés en España no terminan de cuajar y ahora, frente a Neuman, sólo me sale reír con disimulo. Si esto no funciona que el mundo deje de girar.

Neuman sigue a lo suyo, las notas le salen con naturalidad pero de un espacio alejado de aquí. Él está acomodado en un rincón dentro de la música, disfrutando de ella, jugando con ella. Neuman lo está haciendo muy bien.

Con Dizzy estoy a un paso de la felicidad. Un base rítmica de cuerdas y teclados que es pura crema, una voz dulce con coros agradables, un mundo perfecto que dura casi ocho minutos.

Bye Fear / Hi Love es la apuesta segura a la gloria sobre la pista de baile y Boystar nos ha hecho gritar cuando la canción nos lo ha pedido. Mientras, Neuman ha ido cambiando de guitarra como de pantalón, desde el principio cada tema lo ha tocado con una guitarra distinta. Hecha cuentas.

En Deleted Files he visto guiños de Explosions in the Sky o Mogwai. La canción es minimalista y multiforme, post-rock y espacial, es eso y muchas cosas más.

Dicho lo cual, Neuman es recomendable a nivel superlativo, su nuevo Crashpad te ofrece canciones como templos y las digieres como agua bendita. Al verlo tocar en directo, comprendes el verdadero gusto de los músicos por su música, el cariño en los instrumentos y melodías y el que hay conciertos en los que vivirías eternamente y yo, aquí, me echaba unos años.