Nacho Vegas, y ¿por qué no?

Estos días se va a celebrar un concierto homenaje al músico asturiano, no sé si es bueno o malo, simplemente es, y está, y además, se le espera.

Las canciones de Nacho Vegas pueden gustar, o no, o todo lo contrario, pero lo que no es cuestionable en ningún caso es su capacidad de trabajo, de pasión, de implicación en lo que hace, de estar, de ser, y de parecer.

Hay quienes desde la retaguardia, atacan, no lo ven muy claro; y por qué un homenaje, ahora no toca, a quién ha empatado, ¿se ha muerto?. Seguramente hubieran preferido que el homenaje se lo hubieran hecho al sofá de su casa, con ellos sentado en él, por supuesto.

Las canciones de Nacho Vegas pueden gustar, o no, o todo lo contrario, pero en sus años de actividad, que no son pocos, ha sabido crear un estilo propio, un sello característico, y no lo vamos a cuestionar, vale, venga, quizá no sea tan original, lo podemos discutir, influencias de Leonard Cohen, Nick Drake, Dylan, bla, bla, bla, pero muy pocos pueden presumir de haber creado la etiqueta “suenaanachovegas”.

La música de Nacho Vegas puede gustar, o no, o todo lo contrario, pero éste ha tocado distintos palos (Eliminator JR, Manta Ray, Migala, Lucas 15) con mayor o menor acierto, no viene al caso, colaboraciones, con quien se lo ha pedido, o no, ha editado discos con otros músicos, prejuicios aparte, ha currado de lo lindo, y sí, esto se merece un homenaje. Igual otros también, muevan ficha señores, no estoy diciendo que le den la medalla al mérito del trabajo, pero hay que reconocer que el tío se lo ha ganado.

La música de Nacho Vegas puede gustar, o no, o todo lo contrario, pero el caso es que está, y además, se le espera.