Hay veces que desearías que algunas noches se repitieran o simplemente que no terminaran nunca…

Así que un concierto tan esperado como el de Ctrl Alt Supr y Supermosca iban a ponerle un final a un fin de semana que muchos hubiéramos deseado que no terminara nunca. Aunque había que entender que los Ctrl Alt Supr venían directos de tocar en Madrid -Junto a Times New Roman para más inri-, y con cansancio acumulado y sin apenas dormir, no se les podía pedir esa barbaridad.

Tras su expedición madrileña, Ctrl Alt Supr abrió el concierto con una extraña, en ellos, seriedad que venía avalada por el agotamiento, pero que al tercer tema se evaporó gracias al gran sentido del humor que acompaña a cada uno de sus temas. Básicamente el grupo es así: interactúan entre ellos y con el público, sin dejar de lado sus mejores y envolventes sonidos; y es que no hacía falta imaginar su música para saber que ahí arriba todo lo que sonaba sobrecogía a los que estábamos bajo del escenario.

Se vio a un grupo con mucha complicidad, entregado a su música y aunque el cansancio volvió a aparecer en algún que otro momento, no significó nada para que el lado más oscuro y personal de Ctrl Alt Supr se deslizara, por fin, entre los acordes de sus guitarras.

En contrapartida, con estilo opuesto y para tranquilizar el ambiente, Supermosca abrió la segunda parte del concierto con sonidos totalmente renovados, mezclando la creación de ambientes con un pop más que personal, intimista.

Una vez leí que la música no puede desligarse nunca de las experiencias y que por tanto permanece en el recuerdo, y puedo decir que Supermosca firmaron dentro de muchos de los que nos hallábamos esa tarde/noche en la Red Shoe.

www.myspace.com/supermosca
www.myspace.com/ctrlaltsuprimir

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