Grupo: We Used to Pray + Íñigo Soler + Filipinxs
Sala: Convent Carmen

Tras la presentación de su cartel en una fecha tan significativa como el Día de la Música y una pequeña incursión a los Madriles a finales del canicular julio, la tercera edición del Atomic Art, la vertiente más multicultural de nuestra querida revista, tuvo lugar este pasado domingo 22 de septiembre. El escenario para las actuaciones, la capilla del Convent Carmen, excelsa y encuadrada en un contenido estilo rococó, se erigía como el lugar de encuentro idóneo para conectar con el espíritu de Chavela Vargas.

2019, el año en el que se cumplía un centenario de su nacimiento, aparecía ante nosotrxs como una excelente ocasión para rendir homenaje a una de las grandes figuras de la cultura latinoamericana. La reina de las rancheras se convirtió en uno de los principales hilos argumentales, pero no el único, para las artistas del market de ilustración del festival. Las obras de Alsina Mandarina, Carmen Frontera, Celeste Ciafarone, Eli Martínez, Eva Ibáñez, África Pitarch, Andrea Savall (Girls from Today), Nastiplastic, Paula M. Rufat, Moratón, Mar Villar y Grisáceos estuvieron esparcidas por el jardín de este desacralizado convento que ya lleva un año consolidándose como uno de los focos culturales más potentes de nuestra ciudad. 

Allí mismo quedó, al alcance de las manos de aquellxs quienes quisieran llevarse un pedacito de Chavela Vargas a casa, un trabajo muy singular. Adiós, Chavela. Gracias x tanto <3, es el proyecto propuesto por Conmilampollas, fruto directo de la colaboración entre Elisa A. Serrano y Pattpon. Las ilustradoras reflexionan a través de los nuevos códigos del lenguaje sobre una figura, si bien llena de claroscuros, innegablemente impregnada por la fuerza de la pasión costarricense. 

A la hora del vermú, Filipinxs, la jovencísima banda que arrasó en la final de la décima edición del concurso de bandas Vinilo Valencia, ofreció un concierto que sirvió como aperitivo previo al lanzamiento de su primer trabajo de estudio. La alianza musical de los apellidos Castellote y Junquero lograron poner a los asistentes de la capilla en pie, como si de auténticos devotos se tratasen. Un espectáculo que fue reforzado por la vitalidad de sus componentes, encargados de arrancar una jornada que ya se esbozaba vibrante.

Tras un prolongado espacio de tiempo, en el que lxs asistentes pudieron disfrutar de la variada oferta del market food del Convent Carmen, tocaba reanudar el turno de las actuaciones. Poco más hay que añadir, al menos por ahora, a la figura de Íñigo Soler tras la reseña que compartimos con vosotrxs sobre su último trabajo, Ahora que está en blanco. A pesar de su largo recorrido escenográfico la ocasión de compartir por vez primera su debut en solitario, aquí, en Valencia, rodeado de amigxs y familiares, tenía indudablemente un sabor especial. Unos nervios calmados por la compañía de Santi C. a la guitarra y las ilustraciones en directo de Pattpon, Íñigo recorrió esa particular travesía en el calendario que, como no podía ser de otra manera acabó en Domingo (Todos tus gruñidos)

La fecha también estaba marcada en rojo en la agenda de We Used To Pray. La banda se encontraba en un parón expositivo (a excepción de su paso por la última edición de Emergents al Palau) pero no creativo, de casi dos años. La formación liderada por Joecar Hanna, regresaba con las ganas y la puesta en escena renovadas. Marcados por un rápido ascenso pujado por la cálida acogida de la crítica y del público, We Used To Pray iniciaba esa misma tarde una nueva etapa con la presentación de su primer LP, Company Undone. Un viaje que atraviesa todas las fases de una ruptura (decisión, ruptura, conflicto, búsqueda, aterrizaje y conclusiones) y que desde una perspectiva conceptual mezcla todos los elementos que caracterizan a la formación valenciana. Rock progresivo en una escalada que culminaba con los dos últimos cortes de la actuación, acompañados por unos audiovisuales redefinidos por las manos de las ilustradoras Alsina Mandarina y África Pitarch.

La formación no quiso despedirse sin antes tocar un último tema en homenaje a la gran protagonista de esta edición, Chavela Vargas. Un emotivo cierre para una jornada reveladora que estuvo protagonizada por la ilusión y las buenas compañías. La tercera edición del Atomic Art echó el telón con el cartel de sold out en la puerta y con la mira puesta en las sorpresas que pueda deparar la edición del año próximo.

Fotos: Iván Gimeno / @pixelatedwoods

Crónica: Cynthia Cruz 

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