Stereoparty 2018: Larga vida a Subterfuge

Grupo: Cintia Lund, Viva Suecia, Neuman
Sala: Teatro Circo Price

Me siento en una de las butacas del Teatro Circo Price y Cintia Lund ya está sobre el escenario. Es la primera vez que la veo en directo y me flipa su estilo. Lleva un traje azul metalizado, el pelo rubio platino tirando a blanco y unas gafas rojas redondas que se pone y quita cuando le parece. Está tocando su nuevo y primer trabajo New York Anthem mientras el público va llegando, con calma. Me fijo en la gente que hay en la pista cuando Cintia toca Vampire y muchos están moviendo su cadera y cabeza de un lado a otro, al compás.

Cuando sale Viva Suecia nos sube la temperatura. El Nudo y la Esperanza la tocan de las primeras y ya tienen metido en su bolsillo a todo el público. Me doy cuenta de que Rafa Val tiene un vozarrón de padre y muy señor mío, de que los instrumentos se juntan, mezclan y explotan como la pólvora y de que los focos de luces, que hay sobre el escenario, están diseñados inteligentemente para que todo, todo, todo brille como se merece.

Mientras toca Viva Suecia van apareciendo artistas de otras bandas, que también son del sello Subterfuge, para hacer sus pequeñas aportaciones. Es cuando Vega sale, canta junto a ellos Los Años y lo hace bien. Luego, aparece Cycle para tocar A Dónde Ir pero no oigo nada a China Patino cuando canta y tampoco sé exactamente qué es lo que está aportando a la canción. Pero ni idea.

Minutos de espera y Neuman sale a escena. Escucho a la gente mandar callar a quien habla, de repente hay muchísimo silencio, todos miramos con los ojos redondos hacia el escenario, todo pupila, todo interés. Tocan Stones y me pregunto cómo puede ser tan, tan buena esta canción, luego Dizzy y me hago la misma pregunta y es que Paco Neuman me resulta alguien distinto, un artista que pone cariño y mimo a cada nota y letra que hace que suene. Tremendo.

El concierto está terminando y Paco lleva como una media de ochenta mil guitarras tocadas. Escoge una distinta para cada canción. Ahora, antes de tocar la siguiente, nos dice que está muy agradecido a Subterfuge, dice que se acuerda de los comienzos y los compara con el presente y que ojalá más fiestas como la que está pasando en este mismo momento.

Turn It suena la última y todos los músicos que han ido apareciendo ahora se juntan en un mismo escenario. Unos cogen baquetas, otros guitarras y micros y en comunión, músicos y público, gritamos este himno entre saltos. Larga vida a Subterfuge, sus músicos y sus fiestas.